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Tras estas portadas tan chungas se esconde una historia real alucinante, narrada en 3 documentales rodados a lo largo de casi 20 años. Todo parte del asesinato de tres niños en West Memphis (Arkansas) en 1993, pero el proceso mediático y judicial que se monta alrededor del crimen hace que el número de víctimas indirectas sea muchísimo mayor, jodiendo la vida de familias enteras, poniendo en evidencia un sistema basado en cualquier cosa menos en la verdadera justicia: venganza, ignorancia, prejuicios... lo puto peor. No puedo negar que me ha impactado muchísimo, hasta el punto de perder el sueño dándole vueltas al asunto. Lo mismo me pasó la primera vez que vi "12 hombres sin piedad". Y es que la justicia (o la falta de justicia, mejor dicho) es un tema que me apasiona y que creo que define bien el nivel de desarrollo, el nivel educativo de una sociedad.

En España no nos libramos tampoco de la arbitrariedad policial y del silencio cómplice de las instancias judiciales y políticas. Otro documental que no hay que dejar de ver aunque nos hierva la sangre es "Ciutat morta", estrenado hace unos días, sobre las detenciones del 4 de febrero de 2006 en Barcelona. Quien niegue la existencia de malos tratos y torturas en nuestro país, quien crea que nuestro sistema judicial respeta los derechos humanos y garantiza la presunción de inocencia y una defensa justa, vive en un universo paralelo, en serio.

Siendo éstas dos historias sangrantes aparentemente excepcionales, no dejo de pensar en que hay miles de casos similares que desconocemos. ¿Cuántas personas cumplen condena en prisiones de todo el mundo siendo inocentes? ¿Cuántas han sido sentenciadas a morir por un delito que no cometieron? El rodaje del primer documental "Paradise Lost" por parte de la productora HBO mostró desde dentro el desarrollo de los juicios, las inconsistencias de la acusación, y abrió un debate público en torno a la sentencia recibida por los 3 chicos acusados del triple crimen. Sin esas cámaras, la atención recibida habría sido nula, y queda meridianamente claro viendo los 3 documentales que el desenlace de la historia habría sido muy distinto.

En fin, estos documentales van más allá del caso particular que cuentan, son incómodos y perturban, pero a la vez son muy necesarios para reflexionar individual y colectivamente. Os recomiendo con todas mis fuerzas que los veáis. Por favor.