Apostatando que es gerundio |
Por fin he iniciado los trámites de mi apostasía. ¡Que me borren!
Hoy comemos... BERENJENAS GRATINADAS
Los padres de mi cuñada Elisa tienen una tienda de productos ecológicos en Crema, cerca de Milán. Cuando ella viene a Sevilla siempre me trae cositas ricas, sabiendo como sabe lo que me gusta masticar.
El año pasado, entre otras semillas, me envió albahaca, que planté y salió estupenda, aunque estos días que me he ido de vacaciones ha terminado bastante perjudicá. Con la albahaca, y la mozzarella de búfala y el parmesano que me ha traido ahora, vamos a cocinar un poco.
-Lavamos las berenjenas y las cortamos sin pelar en rodajas de aproximadamente un centímetro de grosor. Yo no las dejo escurrir en un colador con sal y todo ese rollo porque me gusta que amarguen. Las freimos en abundante aceite de oliva y las dejamos escurrir en papel de cocina para que no se queden muy grasientas.
-Pelamos y picamos finamente cebolla, y la rehogamos lentamente en un poco de aceite de oliva. Cuando esté transparente, le añadimos el tomate, la sal, la pimienta y un poco de azúcar. Y a hacer chup-chup durante 30 minutos a fuego medio. Finalmente, espolvoreamos con la albahaca recién picadita.
-La mozzarella la cortamos en finas lonchas.
-Y a montar las cazuelitas (yo uso una cazuelita de barro para cada persona): primero un poco de tomate, luego una capa de berenjenas y otra de lonchas de mozzarella, y vamos repitiendo hasta llenar la cazuela. El último paso es echar el huevo batido con un poco de sal, y terminamos con una última capa de mozzarella.
-Finalmente espolvoreamos con el parmesano recién rallado y una pizca de albahaca, y gratinamos en el horno hasta que veamos que el huevo ha cuajado y la superficie está doradita.
Buon appetito!
Ingredientes por persona (1 cazuelita): 1 berenjena, 200 g. de tomate triturado (yo uso el tamizado de Mercadona, que no tiene sal ni pepitas, está muy bueno), cebolla, 1 huevo, una bola de queso mozarella fresco, albahaca fresca, parmesano recién rallado, sal, pimienta y un poco de azúcar.
La mujer barbuda
Hace unos días tuve un reencuentro entrañable con Armando, al que no veía desde los tiempos del Especulador, un periódico que hacíamos en la facultad con pocos medios y mucha mala leche. Aquellos maravillosos años... El caso es que cada uno ha seguido con su vida, en Sevilla, y nunca más nos hemos visto. Algo increíble.
Bueno, lo que quería decir es que me habló del proyecto que ha puesto en marcha, La mujer barbuda, y recomiendo echar un vistazo.Divine!