viernes, junio 27, 2014

El vídeo del viernes


John Fullbright. Satan and St. Paul

martes, junio 24, 2014

Calabacines marinados


Ingredientes (para hacer una guarnición o primer plato para 4-6 personas):
- 1 kg. de calabacines
- Medio vaso de ceite de oliva virgen
- 3 cucharadas de vinagre balsámico
- 3 cucharadas de vinagre de Jerez
- 1 cucharada de sal gorda
- Ají molido o 1 chile rojo fresco (esta marinada es ligeramente picante)
- 1 cucharada de orégano
- 2 dientes de ajo picados muy fino
- Pimienta negra recién molida

En una fuente grande mezclamos el aceite con los vinagres, la sal, el ají molido, el orégano, el ajo y la pimienta, removiendo muy bien todo. Reservamos.

Lavamos y cortamos los calabacines en rodajas o longitudinalmente, como prefiramos. Calentamos una sartén o plancha, pincelamos una cara de los calabacines con aceite de oliva y los tostamos por esa cara unos dos o tres minutos, por tandas. Pincelamos la parte superior, les damos la vuelta y hacemos otros dos o tres minutos. Con unas pinzas de cocina, vamos sacando las tandas de calabacines a la plancha y colocándolos en la marinada. Tapamos la fuente y reservamos fuera del frigorífico hasta que se enfríe. Después, a la nevera, donde les daremos la vuelta de vez en cuando para que se empapen bien de la marinada. Hay que sacarlos un poco antes de ir a comerlos, porque lo suyo es que estén frescos, pero no fríos o con la marinada cuajada. Cuando los hayamos terminado, puede que nos quede marinada en la fuente, que podemos guardar para usarla posteriormente como aliño picante de ensaladas, pescados, verduras,...
Si decidimos hacer los calabacines en una parrilla o barbacoa, no es necesario pincelarlos antes con aceite, ¿eh? 
Rico, rico.

viernes, junio 20, 2014

El vídeo del viernes


Israel Nash. Rain plans

Y si os habéis quedado con ganas de más (como yo, que en este caso excepcional 8 minutos me parecen pocos), también en acústico:
 

jueves, junio 05, 2014

Primavera Sound. Barcelona, 29-31 de mayo de 2014

A medida que me hago mayor, va disminuyendo el estrés en festivales de este tipo, donde los conciertos se solapan y los escenarios están a tomar por culo unos de otros. Antes sufría, ya no. Aunque no están todos los que fueron (también pude ver a Warpaint, Grupo de Expertos Solynieve, Jonathan Wilson Fa-fa-fa-fa-fa-fazon-fazon, Television demostrando que Marquee Moon es lo más moderno que se ha grabado nunca, Caetano Veloso muy bien acompañado de músicos jóvenes, o Seun Kuti & Egypt 80 viviendo de las rentas del gran Fela Kuti), os dejo algunas fotos que pude hacer.

Julian Cope apareció en el escenario del Auditori descolocándonos a todos/as. Con toda la pinta de un Rob Halford con pelo y camiseta de Neu!, actuó él solo con su guitarra... 

Real Estate. El difícil arte de la melodía pop.

Nacho Vegas estrenando un nuevo escenario en el Primavera Sound, chiquitito y cerrado, pero matón.

Antibalas. El único descubrimiento que me mereció la pena. Vientos, quiero vientos.

Neutral Milk Hotel desde muy lejos. Apenas los pude apreciar. Los conciertos nocturnos (Arcade Fire, Queens of the Stone Ege, The National...) han sido mogollónicos y cero disfrutables. Para mí, ha sido el Primavera Sound más diurno de la historia. 

Charles Bradley dándolo todo. EL MEJOR. EL MÁS AUTÉNTICO. SOUL IS THE ANSWER. Lloré.


León Benavente. Había oído hablar muy bien de su directo y así es, suenan que te cagas.

El cielo se cubrió de nubes negras justo antes del concierto de John Grant. Y yo sola, sin nadie con quien compartir el momentazo...

Me daba igual la soledad, los cubos de agua, el frío. Where dreams go to die también me incomoda, but I like it, no lo puedo evitar. Fue ÉPICO.

Y fue terminar el concierto y salir el sol...


Dr. John, a sus 73 añitos, todavía tiene fuerzas para levantarse del piano y colgarse que le cuelguen la guitarra. Morirá con las botas puestas, pero aún es un ejemplo de buen gusto y dignidad. Bravo.

Renuncié a los Pixies por ellos, The War on Drugs. Nunca antes había visto en el Primavera Sound que un concierto empezara con retraso (la puntualidad es siempre impecable) y, para ser la primavera vez, fue muy preocupante. ¡25 minutos de prueba de sonido! Ahora el bombo, ahora la caja, ahora los platos, ahora la guitarra, ahora otra vez la batería que no nos convence... No sé qué pasó, pero mucha gente se desesperó y se fue antes de que arrancaran inseguros y dubitativos. Para la segunda canción yo ya había entrado plenamente en su rollo. Me gustan. Pero aquí los horarios hay que cumplirlos sí o sí y tuvieron que abandonar el escenario a la hora prevista, todos con un cabreo monumental, sin despedirse. Un fallo así, en un escaparate como éste, todavía les tiene que andar doliendo. 

Volcano Choir. No conocía este proyecto de Justin Vernon. Cantando desde un atril en plan predicador nos dejó absolutamente embelesados con su propuesta sónica que, según comentó, no volveremos a ver jamás. Fue tan tajante que hasta barajamos la posibilidad de que tuvieran planeado un suicidio colectivo.

Ty Segall. Aunque el sonido no fue muy bueno y encima iba y venía con el viento, se agradeció algo de energía supervitaminada y punkarra en el cartel, porque vaya el nivel de intensos de este año... La foto está movida porque me estaba moviendo, obvio.