martes, octubre 08, 2013

Cardiopatías


Juan Miguel Contreras, amo y señor del blog El Caimán sincopado, y autor de libros como "Cuando acabe el invierno" y "La muñeca rusa", tiene preparado otro libro de relatos que quiero leer. Como vivimos en un cold cold world (tal y como canta divinamente Danny George Wilson en su último disco), conseguir que una editorial publique una tirada de estas características a alguien que no se llame Jorge Bucay o similar es como una utopía muy utópica. Así que no queda otra que ponerse las pilas y pasar de intermediarios, que también está bien. Yo diría que está muy bien, qué coño, pasando ya de chocarse contra las paredes y acudiendo a quien de verdad aprecia tu obra: las personas que van a leer lo que has escrito.

Hace poco leía "La Universidad Desconocida" de Roberto Bolaño y me acordaba de Juanmi...

"Mi carrera literaria. 
Rechazos de Anagrama, Grijalbo, Planeta, con toda seguridad también de Alfaguara, Mondadori. Un no de Muchnik, Seix Barral, Destino... Todas las editoriales... Todos los lectores... Todos los gerentes de ventas... Bajo el puente, mientras llueve, una oportunidad de oro para verme a mí mismo: como una culebra en el Polo Norte, pero escribiendo. Escribiendo poesía en el país de los imbéciles. Escribiendo con mi hijo en las rodillas. Escribiendo hasta que cae la noche con un estruendo de los mil demonios. Los demonios que han de llevarme al infierno, pero escribiendo." Octubre de 1990.

Pensar que quien escribió las novelas más arrebatadoras de los últimos tiempos, como son "Los detectives salvajes" o "2666", sintió el rechazo de todo el mundo y hasta pasó hambre y frío trabajando en un camping de Castelldefels, nos confirma que el talento no tiene relación alguna con el éxito. No es el único caso. Conocemos cientos, tanto en la literatura, como en la música, el cine, la pintura y todas las disciplinas artísticas. Pero todos estos artistas "fracasados" tenían algo que decir y necesitaban decirlo, aunque los demonios los llevaran al infierno.

También pienso que me hubiera encantado tener la oportunidad de ayudar a Bolaño a publicar uno de sus libros. Mucho. Como me gusta comprar la verdura en una cooperativa de agricultores/as y no en una gran superficie. Lo mismito. Como consumidora que sé lo quiere comprar e intenta no dejarse llevar por modas y corrientes, poder contribuir al proceso de producción o distribución de aquello que realmente quiero poseer y disfrutar es un puntazo. Así que aplaudo y apoyo la iniciativa de Juanmi. Yo ya he contribuido a través de Verkami para poder manosear y leer "Cardiopatías", que para eso tengo mis ínfulas de Peggy Guggenheim de pacotilla. Os animo a entrar en el enlace de arriba y bichear las distintas posibilidades de colaboración porque, desde 3 euros (comprando el e-book), podréis hacer posible el sueño de Juanmi, que también puede ser el vuestro... 


5 comentarios:

Gonzalo Aróstegui Lasarte dijo...

Se lo comenté a Juanmi cuando terminé de leer "La muñeca rusa": qué vergüenza que se editen engendros de todo tipo con tiradas de cincuenta mil ejemplares y a ti no te hagan caso.

Un abrazo, Lu.

La Pecera del Caimán dijo...

Ala, ya estoy llorando... puñeteros...

ned henry dijo...

vale mucho la pena. Saludos a todos!

Scott St. James dijo...

Hola Lu, me vuelves a aceptar por aquí???
No se donde había leído de "Cardiopatías" con anterioridad, quizás fue un sueño, o un deja-vú ficticio y autoprogramado.
En fin, veremos que se puede hacer.
Cheers!

lu dijo...

Gonzalo, no hay más que ver las listas de libros más vendidos para llevarse las manos a la cabeza.

Stop your sobbing, Juanmi. O saco el látigo, que lo mismo es que te gusta.

Pues sí, ned. Y sólo es otra forma de funcionar: comprar el libro antes de que salga publicado. Al público interesado le da igual pagar antes que después, y el autor no se arriesga a quedarse con cajas de libros amontonadas en casa.

Hombreeeeee. Pues claro que eres bienvenido, Scott, el Guadiana de la blogosfera... Qué alegría que asomes la patita, hijo. Sólo tienes que entrar en el caimán sincopado para comprobar que la calidad está garantizada. Venga, que el e-book es más barato que un paquete de tabaco!

Besos!