miércoles, agosto 28, 2013

Nuevos géneros literarios


Me horroriza ver faltas de ortografía. Siento pinchazos en las córneas y en el corazón. Obviamente, entiendo que las personas que no han recibido una educación formal mínima las cometan, pero que estén a la orden del día en los medios de comunicación, por poner un ejemplo bastante lamentable, me pone mala. Eso no quiere decir que yo sea doña perfecta y escriba siempre correctamente, pero os juro abrazando el María Moliner que pongo todo mi empeño, que cuando la cago, a quien más le duele es a mí.


Cuando llega un currículum a mi trabajo con faltas de ortografía... Bueno, bueno, es para verme. Me indigno y despotrico durante minutos y minutos, como si fuera un crímen contra toda la Humanidad. Las prisas, las nuevas tecnologías,... no creo que sean excusas válidas. Quien sabe escribir, debe hacerlo bien siempre. Es mi nazi-opinión del día. Grazias por leherla.

Todo esto viene a que hago excepciones. ¿Sabéis cuando un tornillo se pasa de rosca? Pues eso mismo, pero en la escritura. Hay faltas de ortografía, de gramática, de sintaxis, de VERGÜENZA en definitiva, que me alegran el día en lugar de sumirme en la angustia vital que me provoca ver tan de cerca el apocalípsis, que llegará cuando terminemos comunicándonos con sonidos guturales y hologramas de emoticonos. O sea, ya mismo.


Y la excepción más grande es la que hago con los correos masivos made in Google Translator. Me encantan. Los considero un género literario en sí mismos, auténticas obras de arte, los cadáveres exquisitos del siglo XXI. 

Os dejo el último que he recibido. Me he reído seriouly. Esto es escritura automática y no lo que hacían los surrealistas.

Donación de la Sra. Sonia Vincente.

Querida uno en Cristo Jesús
 
Yo soy la persona nombrada arriba de Kuwait. Estoy casado con Mr.Vincent Williams, quien trabajó con la embajada de Kuwait en Costa de Ivor y durante nueve años antes de morir en el año 2004. Nos casamos por once años sin un niño. Murió después de una breve enfermedad que duró sólo cuatro días.
 
Antes de su muerte éramos ambos otra vez nacido cristiano. Desde su muerte he decidido no volver a casarse o tener un hijo fuera de mi hogar conyugal que la Biblia está en contra. Cuando mi marido estaba vivo él depositó la suma de $ 2. 5 millones (dos millones quinientos mil dólares estadounidenses) en el banco aquí en Abidjan en una cuenta transitoria.
 
En la actualidad, el fondo sigue en el banco. Recientemente, mi doctor me dijo que tengo enfermedad seriouly que es problema del cáncer. La que más me molesta es mi enfermedad del movimiento. Sabiendo mi condición decidía donar este fondo a una iglesia o individuo que utilizará este dinero la manera que voy a mandar adjunto. Yo quiero una iglesia que utilice este fondo para los orfanatos, las viudas, p ropagating la palabra de Dios y que se esfuercen por que se mantenga la casa de Dios.

La Biblia nos hizo entender que el Beato es la mano que da. Tomé esta decisión porque no tengo ningún niño que herede este dinero y mi marido familiares no son cristianos y no quiero que mi marido para ser utilizados por los incrédulos. No quiero una situación donde este dinero será utilizado en una manera impía. Es por eso que estoy tomando esta decisión. No tengo miedo de la muerte por lo tanto que sé adónde voy. Sé que voy a estar en el pecho del Señor. Éxodo 14 vs 14 dice que el Señor luchará mi cas e y voy a mantener mi paz.

No necesito ninguna comunicación del teléfono en este respeto debido a mi salud por lo tanto la presencia de l os parientes de mi marido alrededor de mí siempre es que no quiero que sepan de este desarrollo. Con Dios todo es posible. Tan pronto como reciba tu contestación te daré el contacto del banco aquí en Abidjan. Quiero que tú y la iglesia a orar siempre para mí porque el Señor es mi pastor. Mi felicidad es que viví una vida digna de un cristiano. Quienquiera que desea servir al señor debe servirlo en espíritu y verdad. Rogar por favor siempre a lo largo de su vida.

Contactar conmigo a través de mi dirección de correo electrónico para obtener más información es, cualquier retraso en su respuesta me dará habitación en sourcing otra iglesia o individuo para este mismo propósito. Si me aseguran que usted actúe en consecuencia como ya he dicho aquí. Con la esperanza de recibir su respuesta.

 

Permanezca bendito en el Señor.
 
 
Suyo en Cristo,
Sra. Sonia Vincente.



6 comentarios:

jesus dijo...

Y yo que creía que era un bicho raro al no poder soportar las faltas de ortografía sean intencionadas o no !
Me siento muy identificado con tus palabras Lu , y las suscribo una a una ; me ha divertido mucho el texto que has puesto , tiene unos giros que flipas , he pasado un rato divertidisimo , gracias por compartirlo .
" No quiero una situación donde este dinero será utilizado en una manera limpia... !
" Con Dios todo es posible ... "
" No tengo miedo de la muerte por lo tanto que sé adonde voy ... " Ja , ja, ja , genial , sencillamente genial ; para uno , como interesado y estudioso en la semiología o la significación de las palabras y que se divierte mucho jugando con ellas es sencillamente genial Lu , genial.
Un Fuerte Abrazo !

Gonzalo Aróstegui Lasarte dijo...

Ja ja ja, impresionante.

Hay dos faltas que me ponen especialmente negro: las relacionadas con las expresiones latinas, y adoptadas por el castellano, "motu proprio" y "grosso modo". Casi nadie las escribe bien y encima añaden las preposiciones "de" y "a".

Que bien que te sueltes y nos regales un texto un pelín largo.

Bueno, un abrazo, Lu.

Anónimo dijo...

Pues yo soy muy maniático en esto de la ortografía y procuro evitar las faltas, aunque no siempre lo consigo. Por eso me resulta chocante que incluso algunos escritores cometan tantas que necesiten a alguien para corregirlas antes de publicar nada. Las que a mí me duelen especialmente son confusiones como "haber" por "a ver" y "ahi" (sic) por "hay", escritas incluso por gente que ha estudiado una carrera. El problema reside en cómo le dices luego al infractor que está equivocado sin que se moleste.
Alejandro.

carrascus dijo...

Qué te voy a decir yo, que soy un pejiguera de la ortografía...!?

Me leo y releo lo que escribo tropecientas mil veces, y así y todo alguna vez se me ha escapado algo; menos mal que nunca nada gordo, algún que otro acento de más o de menos y algunas letras de sobra o de falta en alguna palabra.

Fíjate hasta dónde llegué una vez con esto, que hasta dejé de escribir en "La Voz de Huelva" cuando estuve viviendo allí porque después del cariño que le ponía yo a todo lo que escribía y lo que me esmeraba en que estuviese lustroso, me daban las fatiguitas de la muerte cada domingo cuando leía mis artículos en el dominical y comprobaba como la que los repicaba y los linotipistas habían ejercido su creatividad a costa de mis textos. Y eso que era un periódico, que tiene que ser una cosa seria y gozar de buenos correctores. Pues éste lo hacía al reves, niña; los profesionales se cargaban los textos con faltas y errores gramaticales que a veces hasta le daban un sentido contrario a lo que querías decir. Y no una vez ni dos, sino hasta siete u ocho veces en cada artículo. Una cosa penosa; una vez incluso se cargaron un párrafo entero, con lo cual no se entendía bien lo que venía detrás de ése.

lu dijo...

"No tengo miedo de la muerte por lo tanto que sé adónde voy" es una frase brillante, Jesús. ¡Pero dice manera impía, no limpia! Jaaaaaajajajaja, has leído más allá, me meo.

Yo soy bastante indulgente con ese tipo de faltas, Gonzalo. Joder, no todo el mundo sabe latín...

Alejandro, coincido contigo. Esas faltas son las que me ponen más triste, sobre todo cuando las comete alguien querido. Duele corregir. Hay una frase que leí por ahí que te va a gustar: "Hay un círculo del infierno reservado a los que escriben "haber" en lugar de "a ver". El haberno". No me digas que no es genial.

Realmente penoso lo que cuentas, Carrascus.

Besos!

Juanjo Mestre dijo...

Me pasa similar a tí. Es como una especie de atentado al alma. Te enviaré una por móvil que fliparás, jejeje. Besos.