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No hay nada que me dé más satisfacción en el mundo que sacar mi pan del horno. Bueno, a lo mejor exagero un poco y hay otras cosas, pero mi pan, mi pan...
Ingredientes:
- 600 g. de harina de trigo, la más barata
- 12 g. de levadura fresca (yo compro en mercadona unos paquetitos con dos cubos de 25 g., así que uso la mitad de uno de los cubos)
- un chorrito de leche templada
- 330 g. de agua
- 20 g. de aceite de oliva vírgen extra
- una cucharada de miel
- Sal
Después de varios intentos en los que el pan me sabía a levadura y no era pan, sino un arma arrojadiza, me documenté un poco y descubrí el secreto de hacer primero una masa madre. Para la masa madre, en un bol pequeño echamos un chorrito de leche. Si está recién sacada del frigo, la metemos en el microondas unos segundos. En la leche templada disolvemos la levadura, y añadiendo unos 50 g. de harina, hacemos una bolita de masa, a la que hacemos una cruz con un cuchillo y sumergimos en agua templada. Tapamos el bol con film y tendremos la masa madre lista en cuanto suba a la superficie (entre 5 y 10 min.)
Yo hago la masa en la Thermomix, que es más rápido y limpio, pero os voy a explicar cómo se haría a mano. Para preparar la masa en sí, echamos el agua, el aceite y la miel en un bol grande, removemos y calentamos un poco en el microondas. Añadimos a continuación el resto de la harina y la sal y amasamos. Posteriormente incorporamos la bola de masa madre y seguimos amasando bien hasta que la masa quede blanda y suave. Dejamos reposar unos 15 minutos y la pasamos a una bandeja de horno untada con un poco de aceite dándole la forma que queramos. Volvemos a dejarla levar, esta vez tapada con un paño, hasta que la masa doble su volumen (una media hora). A continuación, espolvoreamos harina por encima de la masa y la introducimos en el horno precalentado a 210º arriba y abajo, durante 30 minutos. Debemos colocar la bandeja en la segunda posición del horno empezando por abajo y si metemos también un cacharro con agua, el pan nos quedará más esponjoso y subirá más.
El resultado es un pan de pueblo que lo flipas.