El vídeo del viernes

Peace. California Daze

Insisto con estos niños.

Monkey Week. El Puerto de Santa María, Cádiz. 1 y 2 de noviembre.

All La Glory

Es la primera vez que asisto a este festival pero, desde ya, juro por el gato que me deja vivir en su casa que intentaré estar en futuras ediciones siempre que pueda. En lugar de celebrarse en un descampado desangelado, con barras petadas y WCs portátiles y guarrindongos, el Monkey Week se desparrama por bares, salas, teatros y bodegas de El Puerto de Santa María, llenando de música y buen ambiente todo el pueblo e influyendo muy positivamente en la economía local. Para mí, que me gusta comer bien y beber bien, es un lujo almorzar pescaíto frito y no un triste perrito caliente con pan de ayer. Me he puesto las botas.

No voy a extenderme con los conciertos porque, a pesar de ver muchos (The Posies, Lisa & The Lips, The Damned, The Cubical, Julián Maeso, John Fiztgerald, Chencho Fernández, Cabezafuego, Beggar´s House, Los Labios, Los News, The Sweethearts from America,...), me quedo sin lugar a dudas con el de All La Glory. Ya los había visto en la Sala Malandar (Sevilla) reinterpretando íntegramente el "After the gold rush" de Neil Young (podéis leer la crónica de tamaño concierto en el blog de David González), pero me alegro infinitamente de haber repetido programa, porque lo de este grupo no tiene nombre. Bueno, sí: buen gusto, trabajo, seriedad, sensibilidad. Sin temor a exagerar, lo mejor del Monkey Week con diferencia. Y mira que me apetecía ver a los Posies... Pues no, los All La Glory dejan en pañales a grupos tan consagrados como ellos, y lo afirmo así, sin despeinarme, feliz, entusiasmada. 

Así que paso de poner más fotos de conciertos; el protagonismo absoluto va para ellos y para el excelente condumio.

El vídeo del viernes

Lou Reed & Metallica. Sweet Jane

Tuve la gran suerte de ver esta actuación en directo. Cuando Metallica invitó a Lou Reed, todo el Madison Square Garden gritó Luuuuuuuuuuuuuuuuuuuuu, y yo... yo... yo lloré. Fue en el 25 Aniversario del Rock & Roll Hall of Fame, hace justo 4 años. Si queréis leer la entrada más larga jamás escrita en este blog (la ocasión lo merecía), pinchad y arañad el suelo con los dientes. Yo la releo y pienso que necesito 20 vidas para asimilar lo que vi aquellas dos noches.

Esta semana ha sido una bajona total. Encima se muere un domingo, el colmo de los colmos. He pensado que van a morir todos, que nos vamos a quedar más solitos que la una con sucedáneos tan chungos como Mumford and sons. Qué triste... Sin embargo, creo que somos unos privilegiados por haber coincidido en época (y a veces incluso en espacio) con artistas que serán recordados por los siglos de los siglos. Somos o hemos sido contemporáneos de auténticos referentes culturales, artistas que han sabido crear obras únicas y trascendentes. ¿Qué pasará en el futuro? No lo sé. Sólo sé cómo me voy a sentir cuando muera Aretha, cuando muera Neil, cuando muera Bob. Como un puto trapo.